¡Summer Skin!
Consejos para preparar tu piel para las altas temperaturas.
Los termómetros suben y la piel demanda diferentes cuidados. Apúntate estos 5 tips infalibles para que tu piel luzca más sana y resplandeciente en la época estival.
Cuando suben las temperaturas las necesidades de la piel varían y la rutina de belleza de los días más fríos deja de ser efectiva. Por eso es necesario trazar un plan de acción modificando los cuidados de belleza para evitar deshidratación, falta de luminosidad y aspereza.
La piel, nuestro escudo protector
La piel es el mayor órgano del cuerpo humano y constituye una barrera de defensa natural frente a agresiones externas como el calor y el sol que pueden ser devastadores para la piel. Para que ese escudo protector no se debilite lo ideal es mantener unos hábitos saludables, el estrés a raya y una buena rutina de cuidados.
Cuando nuestra barrera hidrolipídica se debilita pueden aparecer signos indeseables como sequedad, picor, grietas, rojeces o aspereza. El calor hace que la piel se deshidrate y se reseque, efectos que son la antesala de otras consecuencias como la aparición de arrugas, líneas de expresión y descamaciones. El sol, por su parte, es causante de estrés oxidativo por la acción dañina de los radicales libres, responsables directos del envejecimiento prematuro. Las consecuencias en la piel podrían ser quemaduras, irritación, manchas, flacidez y arrugas más marcadas. Para evitar esto, nada mejor que una rutina de skincare adecuada que permita a nuestra piel hacer una correcta y saludable transición a la época estival. Toma nota de estos consejos top para cuidar la piel como nunca este verano.
Un paso innegociable, la limpieza facial
Aunque todo el año es recomendable realizar una correcta limpieza facial para mantener la piel sana y bonita, lo cierto es que en verano este paso es aún más importante. El sudor, la crema solar, la polución, el cloro de las piscinas, el salitre del mar… limpiar a fondo la piel a diario va a eliminar impurezas que podrían obstruir los poros y provocar alteraciones cutáneas como brotes de granitos.
La doble limpieza se perfila como la mejor estrategia para que la piel se mantenga saludable y logre potenciar su luminosidad y belleza. Por la noche aplícate primero un limpiador con base oleosa como un aceite, bálsamo o leche y, como segundo paso, un limpiador con base acuosa como un gel o un jabón.
Un gesto que puede marcar la diferencia es acudir a tu centro de estética de confianza en el cambio de estación para hacer una limpieza profunda de la piel.
Exfoliación para una piel luminosa y sana
Este paso es fundamental para poder lucir una piel más lisa pero también para que el bronceado sea más uniforme. Lo que hace la exfoliación es eliminar células muertas que se acumulan en la epidermis acelerando así el proceso de regeneración celular. La piel se nota mucho más suave y está mejor preparada para recibir cualquier tratamiento de belleza que apliquemos a continuación.
¡Ojo! Si vas a utilizar productos autobronceadores este paso es imprescindible para evitar los temidos ‘parches’ en la piel que suelen darse por desconocimiento o descuido. Lo que va a hacer la exfoliación regular es limpiar a fondo la piel eliminado impurezas que no se retiran con la limpieza facial diaria. Para el rostro es preferible utilizar exfoliantes enzimáticos, químicos, que son mucho más suaves y respetuosos con la barrera cutánea sin dejar de ser muy efectivos.
Protégete del sol
Como colofón la protección solar diaria es un básico para evitar los efectos nocivos del astro rey. Aplica tu protector solar como último paso en tu rutina facial diaria, y acuérdate de la regla de los dos dedos que dice que hay que extender una línea de tu protector solar en tu dedo índice y otra en el dedo corazón, la cantidad resultante es la adecuada para proteger la piel eficazmente.
Reaplica tu solar cada dos horas o después de cada baño, esto es muy importante porque la protección va perdiéndose según pasan las horas. Hoy en día es muy fácil replicar el protector solar porque hay multitud de formatos que hacen que este gesto sea mucho más sencillo de realizar como sticks o brumas que puedes llevar en el bolso o en la bolsa de la playa o la piscina.
Dieta Summer Skin
En verano la hidratación no solo la conseguimos a través de cremas hidratantes y lociones, beber suficiente agua nos asegura una adecuada hidratación interna que también se refleja en el exterior.
La dieta es un punto clave en la misión para conseguir una piel más saludable y preparada para el verano. No olvides incluir alimentos que contengan betacarotenos, vitamina C, polifenoles antioxidantes y ácidos grasos Omega-3. Cuanto más colores tengan tus platos mucho mejor. Opta por frutas y verduras naranjas y rojas como melocotones, sandía, tomates… y verduras de hoja verde como la rúcula, el kale o las espinacas.
Los antioxidantes no solo son recomendables en cosmética, también, a través de la dieta, son un arma fantástica para neutralizar los efectos de los radicales libres generados por la exposición solar. Añade a tus menús ingredientes antiox como la cúrcuma, el té verde o los pimientos que serán unos aliados magníficos para cuidar tu piel desde dentro.